Un mes hace ya...

Buenos días a todos!!
Ya hacía un tiempo que no escribía; como ya sabéis, los exámenes quitan mucho tiempo. Pero hoy por fin estoy aquí otra vez, para deciros que ya llevo un mes viviendo en Canadá, y que probablemente este haya sido el mes mas completo de mi vida, con momentos de alegría, de melancolía, de cansancio, de tristeza, de euforia, y sobre todo, de reflexión. Y estos son los que más me gustaría destacar porque son los que hacen que todos los demás tengan un sentido y en algunos casos un objetivo. Y con esto me refiero a que aquí no es todo de color de rosa y un paraíso, porque al fin y al cabo eres uno más y a veces se hace un poco cuesta arriba, pero todos los momentos malos y difíciles acaban reduciéndose a nada con un par de momentos buenos, sí, y esto viene acompañado de la satisfacción personal de decir: "Estoy consiguiendo lo que quiero por mí mismo, luchando por lo que de verdad me importa"
Y bueno, no creeréis que esto es todo, porque tengo un par de cosas que contaros.
 - ¿Os acordáis de cuando os comenté lo involucrada que estaba la gente aquí con el reciclaje? Pues hoy por fin os traigo unas fotos. De verdad que es impresionante lo mentalizada que está la gente.
 - Ayer, sábado, mi host-father me dijo de ir a hacer hiking (senderismo) y como a mí me encanta la  naturaleza le dije que sí. Cogimos a dos de los tres perros (no llevamos a los tres porque uno de ellos es muy viejo y no puede hacer grandes recorridos) y fuimos andando hasta la zona donde empieza el bosque detrás del vecindario y nos adentramos en un sendero bastante amplio que nos llevaría a la cima de la montaña. Yo le pregunté a Jason (host-father) que si podríamos encontrarnos algún oso o un cougar (puma) por aquí y el me dijo que podría ser, pero que lo más seguro era que no. Además el pasa por este camino todos los días y dice que sólo una vez había visto un oso y nunca en su vida  un cougar. Como dato, los pumas son animales muy peligrosos ya que junto con los osos polares son los únicos animales que atacarían a un humano si estuvieran hambrientos, así que mejor no encontrarse uno.
Pues cual fue mi sorpresa que cuando ya llevábamos 5-10 minutos andando, un cougar cruzó el camino a unos 100 metros de distancia; Jason se quedó petrificado y llamó inmediatamente a los dos perros para que estuvieran a salvo. Retrocedimos de espaldas al camino, mirando constantemente al lugar donde el puma se había metido y salimos de allí. Fue un rato de mucha tensión y lo mejor es que la primera vez que ve uno en su vida tiene que ser conmigo. Después de esto decidimos ir a otro sendero a unos 15 minutos en coche y subimos a la cima y allí tomé unas fotos, que podéis ver abajo.
También os dejo unas fotos de mi taquilla del instituto (un poco liada btw) para que tengáis algo más que ver.

Y eso es todo por hoy, espero que hayáis disfrutado la entrada y que se os hayan puesto los pelos de punta como se me pusieron a mí ayer.
Un saludo!!

Estas son las casas de mi vecindario. Como podéis ver en los jardines delanteros están las cajas de reiclaje de las que os hablé.

Esto es un cougar (puma), como podéis ver intimida bastante, pero lo mejor no es eso, sino que como podéis ver en la imagen de abajo, puede llegar a medir casi 2 metros y pesar 80 kg.

Estas son las fotos echadas desde la cima de la montaña a la que subí haciendo senderismo. Si os fijáis bien, al fondo se ven unas montañas, eso es el estado de Washington, en EE.UU, y si os fijáis aún mejor, podréis ver el mar entre el estado de Washington y Canadá.

Y aquí estoy yo.